jueves, 28 de julio de 2016

After

Este libro ha sido el más adictivo en mucho tiempo. Supongo que es un tópico común en las relaciones de pareja, un cliché, o tal vez un karma que debe superar cada ser que está en este mundo. Supongo que es cuento de hadas real que tenemos todas las mujeres implantados en el cerebro. No es el de la chica humilde que de pronto encuentra a su príncipe y éste la rescata y le cambia la vida. Es el de la chica perfecta, tan buena, tan inocente (porque inevitablemente todas somos inocentes al inicio) que de pronto encuentra al chico malo y éste la conquista. La saca de la burbuja en donde ella tiene el control de todo, la saca de sus esquemas, se enamora de ella  dejando de lado su naturaleza esquiva e insensible y comienza a abrirle su corazón. Quien diga que las mujeres esperamos el “y vivieron felices por siempre” está equivocado. Tal como decía el Sr. Bennet, las mujeres anhelamos que nos rompan el corazón, anhelamos el sufrimiento amoroso, la añoranza por lo que tuvimos o podríamos tener, pero con drama de por medio o no nos sentimos vivas. Porque nos guste o no, la felicidad es tan momentánea y su efecto tan imperceptible y el dolor es tan profundo, tan real, tan duradero, y eso es lo que nos hace sentir realmente vivas, ése sensación de dolor porque es perceptible, tan real, casi tangible. La felicidad por el contrario es tan irreal. Por eso es que cuando estamos felices nos sentimos en las nubes, como si no estuviera sucediendo, como si fuera un cuento. ¿Será que el estado natural del hombre es el dolor, aprender a sentirlo, a reconocerlo, a superarlo?  Tal vez la felicidad sólo exista a modo de consuelo, para los débiles que no son capaces de lidiar con el dolor, son pequeñas pausas para que sobrevivan, pero un estado irreal, casi alucinógeno, y no un fin en sí mismo. Escribo esto y me pregunto si a alguna chica no le ha pasado lo de la historia romántica con el chico incorrecto, en serio. De pronto se vuelve más claro que la vida de todas las mujeres es una novela. Tantas situaciones dignas de contar, tantas miradas furtivas y corazones rotos. Al fin entiendo cómo funciona la vida y qué se pierde después…

Y aquí estoy

Y aquí estoy 
Terminé la universidad finalmente 
Las últimas semanas no sentí nada diferente 
Nada 
Ni nostalgia 
Sólo un discurso mental lógico sobre que existía esa posibilidad 
Y de repente me siento vacía 
Emocionada, mejor dicho 
El último viernes se transformó en un resumen de mis años de universidad 
Pero tantos años no alcanzan a resumirse en unas horas 
Y he vivido tantas cosas 
He conocido a tanta gente 
Y los caminos se han unido, separado y enredado tantas veces 
Y siento nostalgia de todo 
De lo que viví 
De quien fui 
De los que compartieron un poco de su vida conmigo, para luego ser simples recuerdos 
De los desayunos eternos para llegar tarde a clases 
De los carretes interminables 
De los días donde todo era tan fácil 
O menos complicado 
Y es que la vida se ha vuelto tan complicada 
Sería ideal poder vivir vidas paralelas, aprovechando lo mejor de cada momento 
Reviviendo momentos que ya fueron 
Y es que sé que las cosas serán tan distintas desde ahora 
Sé que estos últimos años los he aprovechado todo lo que he podido Aunque sigo pensando “Y si…” Esta incesante sensación de querer mejorar todo, aunque todo haya sido tan bueno como podía ser en ese instante 
Tantos recuerdos 
Podríamos escribir cinco libros con todo lo vivido 
Cada semana una cien historias, historias que guardé en un baúl que desconocía 
¿Qué hace uno con tantos recuerdos? 
Hay tantos duelos que no hice 
Dejando atrás los sentimientos para que no dolieran más tarde 
O tal vez sólo escribiéndolos en algún diario, para que el dolor y la felicidad se quedaran atrapados en el papel 
En este instante de tanta felicidad, de tanta nostalgia sólo quiero darle las gracias 
Gracias a todos los que estuvieron ahí, aunque fuera sólo un momento Gracias por todas las risas 
Por todos los interminables llantos 
Por tantas anécdotas 
Por tantos abrazos 
Por tantos brindis y tantos cigarros 
Por tantos sermones 
Por tantos reclamos 
Gracias por compartir su cariño 
¡Y es que son tantas personas! 
Nunca me arrepentí de haber participado en tantas cosas en estos años Tantos sueños 
Tantas cosas sacrificadas 
Porque todo me enseñó algo distinto, incluyendo mi traumático odio al japonés 
El quedar agotada porque vivimos la movilización más intensa de nuestras vidas y en donde 
Traducción decidió, de una vez por todas, que íbamos a ser parte de algo 
El compaginar tantas actividades 
El entender que no se puede tener todo en la vida 
Caer en cuenta que el tiempo es limitado así que es mejor elegir 
Y que una vez que eliges, ya no hay vuelta 
El saber que hay caminos de los que es mejor alejarse 
Pero si decides tomarlo, debes hacerlo con plena conciencia 
Sabía que eventualmente maduraríamos 
Que algún día las cosas no serían tan simples ni tan livianas 
Pero me alegro de cada paso que di 
De cada “hola”, de cada sonrisa y de cada lágrima 
Soy quien soy gracias a lo que viví y a lo que sentí mientras esto sucedía 
 No me arrepiento de nada…

Lo que quiero


¿Qué es lo que quiero? 
Amigas 
¿Y eso que significa? 
Gente a quién querer 
Gente en quien pueda confiar 
Gente con quien pasar las penas, pero, por sobre todo, 
Gente con quien pasar las alegrías 
Porque estoy chata de hacer de paño de lágrimas, de psicóloga, de polola sin serlo 
Y no es porque no quiera ser una amiga real (según el concepto tradicional) sino porque estoy cansada de personas que sólo aparecen para las tragedias 
Quiero amigos que estén, pero que también respeten mi espacio 
Que sean consecuentes con lo que digan y lo que hacen, no que critiquen un día y al siguiente digan lo contrario porque ya no les conviene 
Quiero personas reales, leales, que no se auto compadezcan, que enfrenten la vida, que asuman sus propias culpas 
Está bien ser amigos, pero ya no puedo hacerme cargo de problemas ajenos 
Suficiente con los propios 
Voy a cumplir veinticinco, soy un adulto y quiero tratar con adultos Basta con crisis de adolescentes emo, estoy demasiado vieja para esas estupideces

Sentir


Es como si llevara meses sin escribir
Probablemente porque ha pasado mucho tiempo
Mi corazón está angustiado
Esto de ponerme adicta a un libro y después dejarme llevar por los sentimientos que son narrados no es nada divertido cuando en el dichoso libro hay tanta angustia
Hasta quiero llorar a ratos
O fumarme un cigarro para olvidar
¿Será que esa angustia me es familiar?
De no haberla sentido en algún momento de mi vida, no podría estar sintiéndola ahora
Y supongo que alguien que no ha vivido eso no podría plasmarlo con tanta fidelidad en un libro
En fin… supongo que la gracia de leer es esa
Vivir a través de otro
Sentir a través de otro
Y en las buenas y en las malas, es simplemente sentir…